La ciudad desde la zona elevada del cementerio de Montjuic |
Hoy toca esta música, podía haber elegido otra quizás un poco más "fúnebre" pero no me interesaba amenizar la lectura con algo así y por lo tanto mi elección fue la que AQUÍ os dejo.
Estos días atrás me quedé un poco impresionado por algo que me sucedió mientras buscaba información para una de mis salidas-excursiones. Alguno podrá ver en el destino de esta salida un lugar de morbo, incluso de mal gusto pero yo me la planteé con total naturalidad como una oportunidad de observar de cerca, arte, belleza y todo en un lugar al aire libre y aún estando en una gran urbe, con mucho silencio y recogimiento.
Se trataba de visitar el enorme cementerio de Montjuic; este campo-santo que ocupa una buena parte de la montaña que le da nombre, era un lugar insólito para mi pues no lo había pisado nunca, ni tan siquiera por algún triste acontecimiento que me llevara allí para acompañar a algún ser querido.
Una famosa familia |
Debo reconocer que ya desde pequeño me han gustado los cementerios, y éstos fueron mi mejor excusa cuando en mis años de niñez mi madre, algún que otro domingo decidía llevarnos a misa a mí y a mi hermana; yo le decía que fuera entrando en la iglesia que iba un momento al cementerio y es que como en casi todos los pueblos pequeños iglesia y cementerio convivían a escasa distancia, y allí me quedaba viendo lápidas y nichos "jugando" a ver quién era el que se había muerto con más edad, con menos o simplemente buscando cosas curiosas; lo que fuera para dejar pasar el tiempo sin tener que escuchar la palabrería de aquellos hombres a los que, como a muchos de ese "gremio", se les va la fuerza por la boca mientras viven placidamente y con una vida poco o nada respetable ante mis ojos por culpa de tanta hipocresía implícita en dicha "profesión". Los únicos que siempre me han merecido un gran respeto son los misioneros y no tanto por que lleven la palabra de Dios allí donde estén, sino por estar desprendidos de cualquier tipo de lujo e incluso muchas veces casi de lo más básico, por todo esto y además por ayudar de VERDAD; casi la misma estampa que esos curas orondos de los pueblos y ciudades que se dedican al buen comer, al buen vivir e incluso al buen joder aunque su demagogia e hipocresía vayan en direcciones contrarias.
Continúo con lo que estaba que me disperso con el tema eclesiástico....
En junio de 2006 empecé mi andadura como bloguero y han sido con el actual, cuatro los blogs donde he depositado mis palabras, mis sentimientos, mis pensamientos, mis inquietudes. Comencé con uno dedicado en general a la Lírica pero pronto me di cuenta que Alfredo Kraus ocupaba un lugar preponderante en dicho blog con lo que decidí, dado el vacío de información en internet sobre tal ilustre figura y mi conocimiento de bastantes cosas relacionadas con el tenor canario, abrir un blog específico para él.
Sin duda ese blog me ha dado muchísimas satisfacciones tanto por la gente que he conocido, personas de los cinco continentes como por permitirme situaciones impensables antes para mí como por ejemplo ser guionista y co-locutor en una serie de programas de una emisora de radio, dedicados a la insigne figura de Kraus.
Además de este blog me aventuré a comenzar otro sobre viajes y rutas pero cada vez tenía menos tiempo para escribir y para todo en general por lo que este blog viajero apenas vio la luz con unas pocas entradas y decidí dejarlo.
Después de unos años, el blog de Kraus decidí abandonarlo no por falta de material sino un poco por hastío y por la "erosión" que producen a veces los seguidores que llegan en ocasiones a querer imponerte como debes llevar algo que era desinteresado por mi parte y un modo de compartir cosas con los demás, y como no tenía obligaciones con nadie, ahí se quedó. Pese a esto y desde que dejé la escritura de este blog por la cabeza me rondan cosas con respecto al Artista canario y no creo que haya dicho la última palabra sobre el mismo, me falta un empujón y quizás un poco de financiación para que lo que tengo en mente pueda llevarse a cabo, pero tiempo al tiempo....
Sin embargo mis ganas de escribir y de contar me hizo abrir este cuarto y último blog donde tienen entrada todas mis inquietudes y como digo en su cabecera básicamente compartir con vosotros momentos de felicidad, de lugares, de experiencias que en muchos casos sirven para haceros partícipes a los que pasáis por aquí y que en ocasiones por unos u otros motivos no tienen la posibilidad de estar en esos lugares por los que yo he pasado, o tampoco la posibilidad de vivir experiencias que yo he tenido.
Toda esta introducción, es porque me he dado cuenta que los "blogueros" que nos dedicamos a escribir prácticamente sobre todo, y en la mayoría de ocasiones más por devoción que no por obligación, dejamos ahí, en este mundo "virtual" que es internet, un legado que posiblemente perdure y sobreviva a la existencia de quién lo escribió.
Os explico y comento todo esto para poner en situación eso que me sucedió estas últimas semanas y me impresionó tanto.
Son hechos que conciernen a una persona totalmente desconocida para mí y de la que nunca había oído hablar, esta entrada de hoy de alguna manera es un pequeño homenaje a esa mujer, Mar Giverny.
Buscaba yo en la red referencias al cementerio que iba a visitar para hacerme una composición de lugar, y uno de los enlaces que abrí me llevo a un sitio fantástico, un sitio donde se hablaba de manera pormenorizada de las principales tumbas y mausoleos del cementerio por antonomasia de Barcelona.
Por lo visto, lo que estaba leyendo con tanta atención en legua española era una traducción de un libro escrito en catalán por Miguel Ángel Díez Besora.
Tras la lectura de dicha traducción, continué indagando sobre esta mujer y cuanto más leía en sus blogs más me llamaba la atención su vida, nada fácil por otro lado como lo es entre otras cosas el tener que sobrevivir a la muerte de un hijo. Después me entero de que a ella se le diagnostica un cáncer y habla de su relación con el mismo con una naturalidad que ya la querrían muchos a la hora de afrontar tan terrible enfermedad. Lo último que leí de ella (amante como mucha gente, de visitar y conocer cementerios) fue la crónica de un viaje a Italia precisamente para pisar un camposanto, en este punto pierdo el hilo.... días después continúo indagando por otros blogs hasta que descubro que la terrible enfermedad ya se la había llevado. Me quedé triste y apenado ya que tenía intención de ponerme en contacto con ella pero fue demasiado tarde, he intentado incluso ponerle "cara" pero no he encontrado ninguna foto suya en la red.
Todo esto viene a cuento de lo que explicaba con anterioridad, esta mujer hace dos años que se fue pero dejó un legado de pensamientos, vivencias, información de la que otros alguna vez podemos beneficiarnos como ha sido mi caso en la preparación de la visita a Montjuic. En todo este proceso de acercamiento a este mundo funerario he comprobado como existe, podríamos decir, un turismo de campo-santos pues hay gente que se desplaza y prepara visitas a ciudades y lugares, únicamente con la finalidad de visitar y ver tal o cual cementerio, tampoco es algo que me extrañe pero era ajeno a tal devoción; yo reconozco que a veces estando de viaje aprovecho y visito alguno que otro pero tan solo porque me viene bien y no tengo que preparar nada especial, todo lo contrario de esta visita a uno de los cementerios de mi actual lugar de residencia.
La visita propiamente dicha fue enriquecedora y me supo a poco como lo demuestra que me pasara en el cementerio desde la apertura del mismo a las ocho de la mañana hasta las 13:00, y eso porque había que comer que si no, pero como sé que habrá segunda parte no me preocupa demasiado, seguiré disfrutando. Lo primero fue ir al puesto de control y vigilancia para sellar el permiso que días atrás me fuera expedido para permitirme hacer fotografías por el interior del mismo y respetando una serie de normas que son de sentido común.
El comienzo de la visita ya me proporcionó una anécdota y la posibilidad de sonreír y es que aparqué fuera del cementerio a pesar de que se puede circular por el interior del mismo con total libertad. Cuando se lo comenté a uno de los guardas de seguridad me preguntó si pensaba salir muy tarde del cementerio en cuyo caso me aconsejaba que aparcara dentro a lo que le pregunté a que se debía esa sugerencia y entonces me dice que a partir de cierta hora, en los alrededores de aquel lugar se ponen las "mujeres de la vida".....palabras textuales, jajajajajajaja.... por respecto al chico no me reí pero es que me hizo mucha gracia el eufemismo para referirse a las "putas" que por alrededores trabajan, pero además me hizo sonreír el que el lugar escogido para la prostitución fuera los aledaños de un cementerio, curioso y seguro que para muchos, morboso cuando menos.... jajajajaja.
Tras la sonrisa de esa situación comencé mi paseo a partir del plano que me había descargado de la ruta a la que antes os hacía referencia pero sólo por llevarlo encima como aquel que dice ya que no le presté demasiado caso, iba dejándome llevar por la intuición y por lo que imaginaba a medida que me encontraba con encrucijadas o lugares de referencia en los que entonces y sin ningún razonamiento lógico escogía para continuar caminando.
El trayecto fue como un continuo serpenteo y en el que poco a poco iba tomando altura hasta que acabé por llegar al punto más elevado, lugar desde el cual se tiene una amplia panorámica de la zona comercial del puerto de Barcelona así como del anillo olímpico.
Lo que me encontraba en el camino era de lo más variopinto, mausoleos y tumbas solemnes junto con otras de lo más "friki" y con las que también esbocé alguna sonrisa. Resulta curioso también lo que la gente pide que le pongan en los nichos, he visto toda clase de muñecos, mascotas, pero también mucha iconografía del Barça, escudos, bufandas, etc.... como poco resultan curiosas muchas de estas tumbas.
He visto también la evolución de los enterramientos y lugares de reposo que con los años y a día de hoy se quedan ya en algunos casos, a una simple referencia de la persona fallecida en una pequeña placa conmemorativa sobre una estructura de hormigón donde hay unas guias para insertar varias de estas placas, o lo que parecería un buzón de correos de los de casa y donde imagino que se tienen depositadas las cenizas de algún o algunos difuntos.
Un ángel parece con la mirada perdida |
Tras un breve paseo enseguida se da uno cuenta de que también a la hora de irnos de este mundo hay "clases" y "clases", aunque ciertamente encuentro bastante absurdo por no decir estúpido, el gastarse auténticas fortunas para de un modo bastante artificial, hacer que en el futuro se acuerden de uno o de su familia cuando alguien visite un cementerio. Y digo esto porque hay auténticas joyas escultóricas y arquitectónicas en lo que son principalmente muchas tumbas y mausoleos de las primeras décadas de existencia del cementerio, osea la segunda mitad del siglo XIX.
En la mayoría de los casos se trata de familias de la burguesía barcelonesa y catalana que en un claro intento de prolongar más allá de la vida, su poder y yo diría que protagonismo, mandaban construir sus pequeñas obras faraónicas.
El día acompañó ya que tenía una agradable temperatura primaveral y un cielo azul precioso aunque éste me daba un poco lo mismo ya que no me había levantado para hacer fotografía paisajística sino para captar un poco la esencia del lugar. Sí tuviera que quedarme con una escultura entre las muchísimas que pude ver, sin duda lo haría con la de Nicolau Juncosa más que nada por el simbolismo de la misma pero lógicamente también por el arte del escultor a la hora de recrear esos pliegues y ese medio rostro cadavérico que puede verse en la misma.
Al final esto es como todo lo suyo es verlo en vivo y en directo por eso en breves fechas volveré de nuevo por el lugar y además con una compañía de lo más agradable, seguro que entonces volveréis a ver al cabo de algunos días alguna que otra imagen de esta próxima visita. Os dejo algunas imágenes más.
Hasta pronto.
Besos y abrazos.
Ger.
Detalle de mi escultura predilecta en Montjuic (Nicolau Juncosa) |
Muy apropiada escultura para semejante cargo |
Algunos llevan sus pasiones futbolísticas.... hasta el final |
Espacio abierto en la zona alta |
El cementerio ha ido creciendo sobre la montaña |
Tierna y romántica dedicatoria de un marido a su difunta esposa |
Vista parcial del puerto barcelonés desde lo alto del cementerio |
Placas conmemorativas |
A contraluz |
Preciosa narracion, una forma maravillosa de hacernos sentir el ambiente del Campo-Santo con sus impresionantes esculturas y tus fotos anadidas
ResponderEliminarQuerida Mayte gracias por esas palabras y me alegro que la narración te haya gustado. supongo que ya conoces este cementerio de lo contrario prepárate una visita. Por cierto, las hay guiadas.
EliminarBesos guapa.
Si...mi bloguero amigo e predileto!!!!... una maravilla su descripción...y suave la presentación.
ResponderEliminarPaulo Roberto Rocha
Obrigado amigo Paulo. Siempre son bienvenidos tus comentarios. Abraços e beijos.
EliminarRealmente impresionante, desde el relato en el que nos das a conocer la historia de la chica que murió, hasta el toque simpático de " las mujeres de la vida " que , curiosamente, trabajan junto al lugar donde la vida ya no existe.
ResponderEliminarNo hay que obviar el gran reportaje fotográfico que has hecho y que, por lo que he visto aquí, ya que no he ido nunca a ese cementerio, también mi preferida es la escultura de Juncosa, que junto a la de Jaume Barba en el Cementeri de Poble Nou, son dos tallas dignas de un museo, el famoso Beso de la Muerte. https://www.flickr.com/photos/12913803@N04/13065196283/
Un abrazo. Nos vemos prontito, jejeje
Una maravilla de relato y fantásticas fotografías.
ResponderEliminarTienes razón que bellos y que paz se respira en los cementerios. Me resisto ir a ellos porque me producen tristeza, pero una vez estoy en ellos me siento bien
Besos Ger amigo