El primer día de septiembre, sin duda la entrada de este mes resulta en cierta medida como una señal de los cambios que normalmente se producen en nuestra climatología (cada día más loca).
Es este noveno mes el que normalmente nos trae la inestabilidad, la bajada de temperaturas y en general días revueltos, toda una delicia para un amante de la imagen como yo. A menudo, me sucede que asocio paisajes, imágenes o instantes con melodías y la de hoy es una de ellas. Se trata de unas nubes bajas y residuales tras una tormenta que me encontré al principio de este verano, un poco antes de llegar a Broto.
Ya queda menos para que volvamos a ver con más frecuencia instantáneas así, los calores estivales irán decayendo, volverán poco a poco las precipitaciones y esas nubes para envolver de humedad todo a su paso. Los bosques como el de la imagen irán perdiendo en muchos casos esos verdes para comenzar, en el caso de los caducifolios, su vestimenta otoñal virando esos verdes a tonos más amarillentos, naranjas y rojizos en otros casos.
Una sugerencia, para interpretar esta fotografía y que seguro os puede resultar evocadora, buscar por ejemplo en youtube “el verano Vivaldi 3 movimiento”; os sonará seguro esa música independientemente de que os guste o no como a mí, la música clásica, y es muy probable que os transporte a un instante como el que os describo.
Preparado ya pues para empezar a vislumbrar el otoño, no sin antes recrearse y disfrutar de los coletazos del verano en forma de tormentas, aguaceros y toda esa locura climatológica. Y así nos llegarán estas nubes, las tormentas y el agua antes de que la naturaleza se vista de gala festiva con los colores otoñales, pero eso ya es otra historia.