ISO 100 40 mm f/ 9,5 1/125 seg. Sin flash Sin trípode |
Música para hoy, AQUÍ.
Con este título muchos podrán pensar que voy a
tratar sobre aritmética y nada más lejos de la realidad.
“Sumar” y
“Restar” son términos que yo utilizo muchas veces para hablar de
actitudes ante la toma de decisiones en el día a día. Podría decirse que hay
muchas maneras de tomarse la vida pero yo lo reduciría a dos, los que la
disfrutan y sacan de ella todo lo positivo... y luego están los demás, que no
digo yo que no la disfruten, pero su modo de hacerlo no me seduce ni convence.
Sin duda
el modo en que nos enfrentamos a la vida viene en gran parte marcado por
el carácter y la personalidad de cada uno; personalidades forjadas por diferentes aspectos pero sobre todo por
el ambiente y las experiencias que le ha
tocado vivir a cada uno mientras crecía como persona y se hacía adulto; en la
infancia casi todo es innegociable, no se puede hacer nada al respecto, pero
cuando uno alcanza la madurez (algun@s no la alcanzan nunca), se tiene algo de
experiencia en la vida y herramientas
para sacar tus propias conclusiones, para ver el porqué de las cosas y sobre todo para discernir entre lo que le gusta y lo que no… ahí hay un último componente que forma a cada
ser humano de manera diferente y única; ahí, en ese punto es donde se produce
el hecho de poder decidir sobre lo que
quiere hacer uno con su vida o al menos como afrontarla.
Yo siempre digo que la vida no es fácil ni
difícil, ni mejor ni peor, es simplemente la que es y la que nos toca vivir a
cada uno, por eso debemos saber
disfrutar con la que nos toca "lidiar" a cada cual y tener capacidad
de adaptación en todo momento.
Me voy a
poner un poco más "trascendental"...
¿Os habéis preguntado alguna vez el porqué de
todo lo que hacemos a lo largo de nuestra vida y hacia que va encaminado?
Os diré como yo lo veo desde mi experiencia y
punto de vista.
La felicidad absoluta NO EXISTE, lo que buscamos
continuamente es conseguir momentos lo más seguidos en el tiempo y más o menos
duraderos, donde disfrutemos de eso, de dicha, y esa debería ser nuestra meta,
nuestra verdadera meta en la vida. Sí os paráis a pensar, incluso las cosas que
hacemos con desagrado o menos gana, aunque no seamos conscientes de ello, van
encaminadas a buscar esos momentos de felicidad.
Felicidad, aunque no lo veamos como tal, es poder comer cada día, es poder dormir bajo
un techo, es poder tener asistencia médica si uno lo requiere, es sentirse
rodeado de personas que te quieren y también de dar amor a esas personas y a
otras más.
Mucha de nuestra felicidad viene condicionada
por el dinero y por lo que el mismo nos permite adquirir, y a su vez éste nos
viene dado por un intercambio entre un trabajo u ocupación que realizamos y la
remuneración pertinente. Sin embargo, me resulta muy habitual ver y escuchar cómo mucha gente se queja, maldice y deplora esas ocupaciones como si esto fuera revertir
esa situación… para mí esto es “restar”. Nada en la vida se arregla sólo con
lamentaciones, sí algo no te gusta, bajo mi punto de vista lo que uno tiene que
hacer es volcar esas energías en acciones que reviertan esa situación y dichas acciones a poder ser que sean
positivas, lamentarse únicamente, no sirve para NADA.
"Restar" es también llevar a cabo una
acción pensando solamente en la recompensa... pienso que uno debe ser más
altruista. ¿Acaso no recibimos ya bastante "pago" con la satisfacción
de dar, ayudar, o prestar algo a los
demás?
Muchas
veces me pregunto cómo es posible que en la mente de un ser como el hombre
capaz de realizar prodigios en el mundo de la física, de las matemáticas, de la
ingeniería o del arte por citar solo algunas disciplinas, quepan sentimientos como la envidia.
Sí los demás poseen algo que tú no tienes,
alégrate por ellos y sí lo que deseas es algo parecido, esfuérzate y lucha por eso, no esperes a que
te sea regalado, lo demás es un gasto
absurdo de energía y que agria el carácter.
Ayudar al prójimo también está muy bien pero en
ocasiones hay que saber cuándo parar si esa ayuda es un canal de un único
sentido... hay personas que son auténticos vampiros del tiempo y la energía
vital que a uno no le aportan nada; en
según qué casos mejor estar lejos de gente así, estos también restan.
Al final, en el transcurso de la vida todos nos
encontramos y cruzamos con infinidad de personas y uno tiene que saber tamizar
para quedarse con aquellos que te aporten algo y "sumen" en tu vida y
para eso que mejor que rodearse de personas capaces de allanar tu camino por
esta "aventura" que es nuestra existencia......
Y ahora me voy a sentar a ese banco de la fotografía, a
reflexionar un poco más sobre estos temas…
La foto está tomada hace unas semanas en la
playa donde me he bañado toda la vida, la playa de la Punta, en Cesantes.
¡¡¡ Disfrutar de la vida !!!
Ger.
Gran reflexión. Felicidades.
ResponderEliminarMuchas gracias Guiller. Se puede compartir o no pero es mi modo de ver el mundo y me gusta contarlo por sí puede servir para algo o para alguien.
EliminarUn abrazo
Que lindas cosas que escribis!! Siempre leo tus notas, y observo las maravillosas fotografías que sacas ...y reflexiono yo también. Gracias por tenerme en cuenta. Un abrazo desde Argentina. Gabriela.
ResponderEliminarQuerida Gabi, cuanto tiempo...
EliminarMe alegra muchísimo saber de ti, que te guste lo que publico y que tambien reflexiones... jajajaja
Como me acuerdo de ti, de lo encantadora que eres y fantástica compañera además de muuy dulce.
Un abrazo y un beso grande para ti "Pibita", desde España.
Si todo el mundo sintiera como tú, el mundo sería mucho más hermoso. Un abrazo. Olga.
ResponderEliminarGracias Olga, no sé si el mundo sería mejor... quizás "diferente", pero te aseguro que en el mío no existirían guerras, injusticias, y cualquier cosa que fuera en contra de cualquiera de los ANIMALES que poblamos este planeta.
EliminarUn beso, guapa.