Al preparar nuestra estancia en Suiza, algo a lo que no teníamos intención de dedicar excesivo tiempo era a explorar sus ciudades. La primera opción pasaba únicamente por visitar Lucerna, pero finalmente le dimos una opción a la capital, Berna, ya que nos pillaba de camino para uno de nuestros destinos de montaña.
Y la verdad es que fue un "encuentro" muy agradable para lo que uno puede ver y descubrir en una ciudad de estas características, en un solo día. Sin duda uno de sus mayores encantos reside en la ciudad vieja (Altstadt) y esto es lo que intenté retratar con esta panorámica de siete fotografías donde destaca sobremanera la aguja de la catedral que se alza cien metros sobre el suelo.
Esto es todo, besos y abrazos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario